Mis procesos y postura como diseñadora

Mi recorrido como diseñadora por la Universidad de los Andes, mi experiencia en Mola Sasa y mi vida personal me ha dejado con unas inclinaciones e intereses particulares. Dentro de estos está, el textil y tejido como oficio y materialidad en sí mismo y también como expresión trascendental de ideas y pensamientos tanto personales como colectivos. El text-il lo entiendo como texto, donde puedo plasmar mis conceptos artísticos, que surgen de conectar y abstraer una investigación rigurosa.

Por otro lado, mi inclinación por trabajar en colaboración con comunidades indígenas de nuestro país. Ellos son guardadores de una herencia cultural de un valor incalculable y de técnicas ancestrales que representan una sabiduría atemporal. Esto me mueve a querer generar proyectos de y para ellos, donde son la fuente de inspiración y son también los receptores del proyecto. Este interés lo descubrí y puse en practica por primer vez en mi proyecto de grado de mi bachelor en Diseño: ‘Gente del Río: Tejiendo casa fuera de casa’. Ahí fui medio y creadora de símbolos en el intento de transmitir lo que me compartieron en nuestras conversaciones. Fui entrelazando nuestras conversaciones para crear textos y luego artefactos a través de materiales que lograran contar esa historia. Aún seguimos tejiendo.